domingo, 20 de abril de 2014

CIERRO LA PUERTA

A veces me dan ganas de cerrar la puerta,
que nada externo entre por su hueco inesperado.
A veces en la oscuridad hallo la dicha,
y no añoro la luz , ni a otros seres humanos.
A veces en los  sueños  me afianzo,
pensando que es allí donde estoy vivo.
A veces me refugio en lo que escribo
 y me acuesto en hojas de papel  en blanco.
A veces saco la cabeza de la tierra
y oteo lo que quema el horizonte.
A veces me atrevo, osado, con la guerra,
aun luchando en bando de  perdedores.
A veces guardo los rencores bajo llave,
y sonrió sin convicción a los que pasan.
A veces esta puta farsa juega infame
ganando la partida haciendo trampa.
Por eso a veces  hago bastión de mi morada,
desapareciendo del mundo y de la gente.
A veces no me llama ya la madrugada,
y me quedo quieto, en la perpetua noche.

3 comentarios:

  1. A veces navegando sin rumbo se encuentran islas increibles a las que se desea volver.

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  2. Si cierras la puerta, al menos abre alguna ventana!

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  3. Abrir la ventana implica dejar paso a la luz del sol, y eso, puede llenar de vida los rincones oscuros de una casa desolada, que tal vez no quiera dejar de serlo. Gracias por comentar.

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